La técnica de contacto “piel con piel” consiste en que el contacto entre recién nacido y madre sea total desde el primer momento. El equipo que atiende el parto se ocupa de monitorizar que la progresión del recién nacido sea la correcta y os animan a involucraros en el cuidado del niño desde el primer minuto, secándolo y cubriéndolo con paños calientes. Pero no interfieren en ese vínculo entre el recién nacido y los padres a no ser que sea estrictamente necesario. El recién nacido permanece con vosotros todo el tiempo. Naturalmente, el programa se mantiene cuando vosotros y el niño vais a la habitación individual en la planta de Maternidad.
En nuestro hospital, este programa también se realiza con las cesáreas programadas y las que no sean por situaciones de emergencia. Es decir, los padres pueden acompañar a sus mujeres durante la cesárea y beneficiarse también del Programa Piel con Piel, sin separarse en ningún momento.